Hoy se cumplen 15 años del collapso del 35 W, que hacia usted en ese momento?

La primera línea del informe de investigación estatal sobre el colapso del puente I-35W donde murieron 13 personas e hirió a 145 más hace 15 años.

Esto sucedia hace 15 años:

Era un día normal en las ciudades gemelas de Minneapolis y St. Paul Most, en el estado de Minnesota y la mayoría de los residentes disfrutaban de la cálida temperatura, tras el largo invierno. Arreglaban el jardín, algunos pescaban y otros paseaban junto al hermoso lago. Fue un día de trabajo normal para la mayoría de las personas, pero para muchos pobladores se emplearon de una tarde que no se olvidaría jamás. Era el 1º de agosto de 2007 cuando el puente de la Interestatal 35 W, sobre el río Mississippi, se derrumbó. Fue alrededor de las seis de la tarde. Miles de personas viajaban, desde el área metropolitana, camino a su casa, hacia la escuela, el trabajo, o tal vez sólo a realizar el último viaje, antes de finalizar la jornada.

Por la radio y me escuchar a uno de los locutores, informar nervioso sobre el colapso de un puente en algún lugar del centro de Minneapolis. Enseguida me preguntó: ¿Pero de qué está hablando?. ¿Se trata de un puente peatonal, de uno del ferrocarril, o alguien simplemente está haciendo una broma de mal gusto a los medios de comunicación?. ¿Era un ataque terrorista, pudieron explotar uno de nuestros principales puentes?. ¿Mi hijo, que vino de regreso de la Universidad de Minnesota, estaba en él, o algún miembro de mi familia o amigo?.

La cobertura televisiva se había iniciado, las imágenes eran surrealistas. ¿Podría algo así suceder en Minnesota?, después de todo es la ciudad de los negocios, las artes y las mejores instituciones educativas y de investigación. Esto no podía estar ocurriendo, pensaba: somos demasiado avanzados para esto; pero aconteció. Gran parte del puente de la Interestatal 35 W (comúnmente conocida como la I-35W), sobre el río Mississippi, se había derrumbado.

Las primeras imágenes fueron del metal y del hormigón destruido, de los automóviles reducidos a la mitad, de los camiones sumergidos en el agua, un autobús escolar con 60 estudiantes había caído y quedó peligrosamente en medio del pavimento todo resquebrajado, y un camión semirremolque estaba en llamas. Parecían escenas del infierno.

CONDECORACIÓN

Un grupo de empleados de la empresa constructora Progressive Contractors, de St. Michael, fueron los verdaderos héroes. Ellos comenzaron inmediatamente a llevar a cabo las tareas de rescate y debieron socorrer del agua y de bajo del acero y del hormigón a los sobrevivientes.

Respondieron de una manera excelente, desinteresadamente, y en muchos casos, sacrificaron su propia seguridad para el bienestar de los demás. Fueron 28 asalariados los que recibieron de la Associated General Contractors of America (AGC) el premio a la destreza, responsabilidad e integridad. Además, en la reunión anual de la institución, en enero de 2008, se le entregó un galardón honorífico a los familiares de Greg Jolstad, un trabajador de Progressive Contractors, fallecido durante la tragedia.

Asimismo, muchas personas, generosamente, ayudaron a las víctimas, entre ellos, la policía local, los bomberos, los trabajadores del Departamento de Transporte de Minnesota (MnDOT por sus siglas en inglés), buceadores de la Armada norteamericana y tantos otros que serán grabados por largo tiempo. A todos ellos, se les debe un gran agradecimiento, porque gracias a su accionar y colaboración, un enorme número de vidas nunca serán las mismas.

¿SE PUDO EVITAR?

En 1996, el puente fue identificado como un terreno peligroso de manejo en la época de nevadas. En octubre de 1999, el Departamento de Transporte de Minnesota, a cargo del mantenimiento, implementó un sistema que a través de la fumigación de productos químicos en la superficie, no permitió la formación de hielo. Esta técnica se realizó hasta diciembre de ese mismo año.

Después de que el puente colapsó, se anunció que este método podría haber contribuido a la corrosión de los cimientos. Cabe destacar que fue uno de los primeros puentes de este tipo en los Estados Unidos, en incorporar esta tecnología anti-hielo.

No obstante, antes de la caída, muchos informes llevados a cabo en este puente habían indicado que presentaba inconvenientes en su estructura. El Gobierno Federal, mediante una evaluación realizada en 1990, comprobó que estaba «estructuralmente deficiente» y citó problemas de corrosión. En 2001, el Departamento de Ingeniería Civil de la Universidad de Minnesota tomó nota de otras deficiencias estructurales, y puso en tela de juicio la efectividad en la confección. En 2005, de acuerdo a los datos reflejados en el inventario nacional de puentes federales, del Departamento de Transporte de los Estados Unidos, también se lo calificó como «estructuralmente deficiente». Asimismo, otra inspección realizada, en 2006, por esta dirección, colocó a este puente en la parte inferior de impulso. Se le otorgó una calificación de 50, sobre un máximo posible de 100.