Horror en Milwaukee: pareja detenida por encerrar a sus seis hijos en una bodega

Una pareja de Milwaukee, Wisconsin, enfrenta cargos graves por negligencia infantil luego de que la policía descubriera a sus seis hijos viviendo en condiciones inhumanas dentro de una unidad de almacenamiento.

El hallazgo ocurrió el pasado martes 16 de septiembre en las instalaciones de StorSafe, tras un reporte de un menor llorando que alertó a las autoridades.

Al llegar al lugar, los oficiales percibieron un olor nauseabundo y escucharon la tos de un niño proveniente de la bodega asegurada con candado.Bomberos tuvieron que cortar el seguro para liberar a los pequeños, cuyas edades iban desde a

penas dos meses hasta nueve años.

En el interior encontraron un sofá seccional, un colchón individual sin sábanas y un balde con orina como único sanitario.

La única iluminación provenía de una rendija bajo la puerta metálica, lo que sumió a los niños en la penumbra durante semanas.Los padres, identificados como Charles Dupriest, de 33 años, y Azyia Zielinski, de 26, fueron arrestados minutos después en el estacionamiento.

Ambos dormían en su camioneta junto a un perro, pese a que el vehículo contaba con tres filas de asientos disponibles.

Antecedentes de los padres

La policía encontró un arma cargada dentro de la camioneta, lo que derivó en un cargo adicional contra Dupriest por posesión ilegal de armas.

El hombre, además, figura como delincuente sexual registrado, lo que agrava la situación judicial que enfrenta.

Ambos fueron acusados de seis cargos de negligencia infantil, cuatro de ellos considerados delitos graves por involucrar a menores de seis años.

Las autoridades calificaron el caso como uno de los más impactantes de los últimos años en Milwaukee.

Relatos escalofriantes de los menores

Durante las entrevistas, los niños contaron que llevaban semanas encerrados en la bodega, dependiendo de su hermano de nueve años para alimentarse y cuidar al bebé.

Algunos describieron castigos físicos por parte de Dupriest y relataron que sus padres bebían alcohol y fumaban en la unidad o dentro del vehículo.

Una niña de cinco años confesó que les habían ordenado “no hacer ruido” para no llamar la atención.

Los testimonios fueron respaldados por las condiciones deplorables halladas en el lugar del encierro.

La versión de la madre

Zielinski admitió que la familia llevaba alrededor de seis semanas viviendo en la bodega tras ser expulsada de un refugio para mujeres.

Explicó que sobrevivían con cupones de alimentos, donaciones y beneficios del Seguro Social.

Sin embargo, reconoció que pudieron haber dejado a los niños con familiares, lo que las autoridades consideran una omisión grave.

“Podrían haber estado en un lugar seguro, pero decidieron encerrarlos en una bodega sin las mínimas condiciones de higiene”, señaló la fiscalía.